Las muchas caras de las patatas y sus grandes ventajas
Las patatas fritas pueden llegar a representar una parte importante de tu negocio de restauración. Sus formas, tamaños, aspecto y raciones son muy variadas, y existen numerosas oportunidades para hacer de ellas un elemento rentable de tu menú. El modo y el momento en que elijas ofrecer tus patatas depende de ti, pero son muchos los beneficios de analizar detenidamente esta categoría de producto y preguntarte: "¿Cómo puedo hacer más con mis patatas fritas?" La buena noticia es que existen muchas formas de optimizar su uso, en ocasiones de forma sorprendentemente sencilla. ¿Quieres saber cómo? Veamos más de cerca los cinco métodos más populares (y rentables) de presentar unas patatas fritas.
1) Patatas fritas cargadas de ingredientes y de margen
Poutine canadiense, patatas fritas cargadas de queso con ajo, trufa y parmesano o beicon y queso... tantas opciones de deliciosos e interesantes aderezos como puedas imaginar. Esta apetecible alianza entre patatas fritas y otros ingredientes puede hacer que tus patatas pasen de ser un acompañamiento a un interesante evento principal que ofrezca a tu restaurante jugosas oportunidades de negocio. Esto es así porque las patatas fritas son las perfectas protagonistas de un plato principal y su precio relativamente bajo garantiza que ofrecen un buen margen. Siempre que no las presentes con aderezos comparativamente caros, tus patatas serán un plato delicioso y de alto valor.
2) Unaforma popular de acompañar el plato para una experiencia de cliente completa
Junto a un papel principal merecedor de un Óscar, las patatas fritas pueden ser excelentes actrices secundarias, y son un buen elemento secundario para la carne, el pescado o los platos vegetarianos. Aunque no debemos infravalorar el poder de unas patatas de acompañamiento. Los clientes pueden centrarse en el plato principal a la hora de pedir, pero unas buenas patatas fritas completan el plato. Como acompañamiento son baratas, ofrecen un margen alto y añaden volumen y atractivo al plato. Las patatas fritas pueden suponer una contribución real a la experiencia gastronómica completa. La patata steakhouse, por ejemplo: el complemento perfecto para tu hamburguesa gourmet. Juntas constituyen un menú auténtico y potente en el que las patatas steakhouse juegan un papel secundario, pero muy importante.
3) Haz de tu guarnición de patatas fritas un extra
Tanto si son las tradicionales, batatas fritas onduladas, en gajos con especias, con piel, sin piel... Las patatas fritas pueden adoptar muchas deliciosas y atractivas formas. Su gran variedad las hace adecuadas para su acompañamiento de todo tipo de menús y aderezos, a casi cualquier hora del día. Las patatas fritas son una guarnición que adora la compañía, y esas combinaciones crean potencial de margen de beneficio (especialmente si se sirven en grandes cantidades). Es por eso que son la perfecta opción de guarnición para tu menú. Las patatas fritas como guarnición ofrecen a los comensales la oportunidad de personalizar su menú, o de pedir platos adicionales de guarnición de patatas junto al plato principal, lo que las convierte en una elección de primer nivel. Beneficio para todos en todos los frentes.
CONSEJO: En función de los platos a los que acompañen, depende de ti decidir dónde poner el énfasis del margen. Usar las patatas como acompañamiento de un plato comparativamente caro puede ser más lucrativo, ya que traslada tu margen al plato principal.
4) Comida de rechupete
Hay un momento y un lugar para todo, y esto se aplica también a las patatas fritas. Muchas veces, los clientes prefieren las patatas fritas como acompañamiento de sus comidas, pero estas también son adecuadas como aperitivo o picoteo. De hecho, es un entrante que gusta a todo el mundo, muy fácil de compartir... un bocado sin riesgo, pero agradable.
5) Vender más o no, esa es la cuestión
Dedicas mucho tiempo y energía a diseñar los platos perfectos. Creas cuidadosamente combinaciones óptimas de texturas y sabores. No obstante, a veces tus clientes optan por algo distinto. En lugar de arroz, quieren patatas fritas, o batatas. O en vez de las patatas tradicionales que les propones, prefieren una variedad distinta, o incluso unas patatas fritas con más ingredientes. Sé un estratega: permite su personalización o mejora como forma fácil de vender más. ¡Y todos contentos!
CONSEJO: No olvides mencionar esta opción en tu carta, ya que no todos los clientes tendrán la suficiente seguridad para expresar su deseo de una combinación alternativa.
Como puedes ver, existen muchas opciones para ofrecer tus patatas, todas con sus propias ventajas Eso sí, no te dejes llevar demasiado por las opciones que decidas ofrecer. Es fundamental que identifiques qué oportunidades están ya disponibles en tu negocio de restauración. Al optimizar tu negocio actual en lugar de añadir platos, te aseguras de que los costes continúen siendo bajos, los clientes no se estresen a la hora de decidir y la vida en tu cocina no sea mucho más complicada. Un negocio de comida rápida, con cajas de pago y opciones de carta ya preparadas exige un tipo diferente de menú que un restaurante informal en el que los clientes tienen más tiempo para decidir Cuanto menos tiempo haya para decidir, menos opciones deberás ofrecer. Así que utiliza tus patatas fritas con inteligencia y te darán un rendimiento atractivo.
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